Camino

Hace un tiempo estaba perdida.

Hace un tiempo no sabía quién era, dónde estaba o qué hacía allí.

Hace un tiempo no tenía idea de que hacer a continuación. Mi vida se había convertido en un infierno que me consumía poco a poco, por dentro, sin que nadie pudiese darse cuenta que algo andaba mal. Un día a día que me dejaba cada vez más hundida. Un destino que se me antojaba nada halagüeño. Un futuro en el horizonte tan negro como boca de lobo.

Hace un tiempo intenté buscar el camino.

Hace un tiempo intenté seguir avanzando. Pero a cada paso que daba un cenagal de tierras movedizas me tragaba sin remedio para devolverme una vez más al lugar de inicio. Una tortura. Un deseo casi irreprimible de darme por vencida y dejarme ganar por un destino que no pensaba darme una tregua.

Hace un tiempo la vida me abandonó a mi suerte. Sin embargo, algo me hizo cambiar. Algo en mi cabeza me dijo que lo siguiese intentando. Que no valía la pena sentarme en aquel horrendo lugar a esperar la peor de las suertes. Así que me levante y con más decisión que nunca eché a andar. Caminé y caminé por aquel paraje inhóspito lleno de pruebas que ponían a prueba mi determinación. Pero no me dejé amedrentar y al final conseguí encontrar el inicio de mi nuevo camino.

Hace un tiempo le gané la partida al destino.